Enjoy!

Levantáte, ponete linda tan solo para joder al que pudo tenerte y al que no te tiene, para sorprender a los que te conocen y, por qué no, a los que no te conocen. 
Cuando te veas fea, arreglalo con kilos de maquillaje. Listo. Y sentite la mejor de todas.
Cuando haya un rumor sobre ti, sea verdad o no, anda con la cabeza bien alta, siempre. No mires a aquel que no se lo merezca, fijate en detalles pero no te obsesiones con las señales. Informate de todo lo que pasa para después, cuando te pregunten, hacerte la sorprendida; solo vos sabes que sos una cotilla. ¿Qué? Perdona, no te escuche. Es que, a palabras necias, oídos sordos. Y a los pelotudos, ni el oído, ni la palabra, ni la mirada ni siquiera. Cero. Que se jodan. 
Reconoce tus errores, demostra que te arrepentis, y aprende de ellos. Y con eso, no tendrás ni que mencionar la palabra “perdón”. 
¿Por ocultar? Ocultalo todo; menti, nega, inventate. Pero sólo de tus asuntos; de los de los demás, que se encarguen ellos. 
¿Por los amigos verdaderos? Dalo todo, miente, arriesga, engaña, perdona, ayuda, escucha, habla, calla, ríe, llora. Y ellos lo van a  hacer por vos. Si no lo hacen, sabes lo que tenes que hacer, ¿no? Que la chupen. 
Escucha música todas las noches delante del espejo, baila, salta como si vos fueras la protagonista de ese concierto en el que están todas las personas a las que queres y a las que odias también, tu novio, tus pretendientes y tus ex.
Come helado, manchate, sé feliz en la calle, en tu casa, en el colegio, en las tiendas, en el médico. Esquiva tus obstáculos tranquila, con serenidad. 
Monta en globo, escribí un libro sobre tu vida y proba todas las posturas del Kama Sutra.
Porque vos no criticas, sólo decis la verdad sobre los defectos de ciertas personas.
Sé fuerte, amá, sufrí, olvida, y ama otra vez. Porque la vida es así; te tropezas, te levantas, y volves a tropezar. Pero te volves a levantar…

Smiley.